
Si bien las presas de escalada pueden parecer bastante simples, comprender los matices de cada tipo de agarre es una parte esencial de nuestro deporte ¡y mucho más difícil de lo que parece!
Si bien solo hay un par de tipos de agarre en el gimnasio de escalada, vienen en miles de formas y tamaños, lo que afecta la forma en que los usarás al escalar.
El mejor agarre en una presa de escalada, siempre será aquel que maximice el contacto con la presa.
Más contactto = Más fricción.
Más fricción = sentirse más seguro en la presa.
Esta regla se aplica a todos los tipos de presas de escalada:
Si bien existen técnicas que se aplican a agarres específicos, maximizar el contacto con el agarre siempre será la prioridad.
Veamos los tipos de presa en escalada y cómo utilizarlos.
Jug: la presa de escalada amiga de todos
El anglicismo Jug hace referencia a los manillones, manillas, presas salvadoras, presas buenas, peldaños de escaleras o como quieras llamarlos en español.
Tanto si eres un principiante o un veterano, reconocerás los jugs como un producto popular tanto en los gimnasios de escalada como en la roca.
A medida que los problemas se vuelven más difíciles, a menudos vemos desaparecer los jugs o manillones en cambio por presas más pequeñas y mucho peores.
¡Pero casi todas las rutas para principiantes estarán llenas de estas presas y de magnesio!
Es tentador agarrarse de estas presas, ya que son familiares y se sienten más seguras, pero hacerlo probablemente dejará tus manos rojas, llenas de ampollas y, en última instancia, incapaces de escalar.
Esto se debe a que es fácil maximizar el contacto con los jugs o «manillones», por lo que moverse desde ellas crea una gran fricción que realmente puede lastimar tus manos.
Para evitar este problema, evita reajustar tu agarre una vez que hayas hecho contacto con la presa.
Es probable que tengas suficiente contacto a la primera, por lo que cuando te reajustes, todo que estarás haciendo es triturar más la piel.
Regletas
Las regletas son algunas de las presas más comunes que encontrarás en la escalada, tanto en interiores como en exteriores.
Un elemento clave que hay que entender sobre las regletas es que «regleta» puede referirse a la presa en sí o a la forma en que de utiliza una determinada presa.
Esto también es válido para otros tipo de presas (como pinzas, por ejemplo).
Las regletas son pequeños bordes de roca o resina que solo son lo suficientemente grandes para caber en las yemas de los dedos.
Las regletas pueden variar desde bordes más grandes que se ajustan a varias yemas de los dedos hasta pequeñas regletas de «tarjeta de crédito» que pueden tener espacio suficiente para una fina franja de las yemas de los dedos.
Si bien hay muchas complejidades en el regletaje en las que podríamos entrar, hablemos de las tres formas básicas de agarrar una regleta: regleta abierta, regleta media, regleta cerrada.
Regleta abierta
Para la regleta abierta, coloca la yema de un solo dedo en la presa y extiende los nudillos tanto como sea posible.
Esto proporciona muy poco contacto con la presa y, por lo tanto, es la forma más débil de regletear.
Sin embargo, la regleta abierta también es la más saludable para los dedos, ya que causa la menos cantidad de tensión en los tendones.
Se sugiere la regleta abierta para cualquier entrenamiento, pero no es del todo práctico en la pared.
Regleta media cerrada
Para dejar la regleta a medio cerrar, aumenta el contacto con la presa doblando los nudillos centrales en 90 grados.
La regleta media tensiona los dedos más que la regleta abierta, pero encontrarás que es un agarre mucho más fuerte.
A menos que realmente estés motivado con tu proyecto, se sugiere usar la regleta media para la mayoría de las regletas.
Nota: el pulgar no se levanta ni se dobla para cerrar la regleta, debe permanecer abajo.
Regleta cerrada
Por último, tenemos la causa número uno de lesiones en los dedos: la regleta completamente cerrada.
Para regletear de esta forma, coloca los dedos como si fueras a hacer la regleta media, pero envuelve los dedos con el pulgar en la parte superior y acerca ligeramente la palma hacia la presa.
La regleta cerrada maximiza el contacto con la presa, pero ejerce una enorme presión sobre los tendones.
Este agarre no se recomienda para principiantes, aunque incluso los escaladores avanzados tienden a rehuirlo.
Bolsillos: «¿qué dedos utilizo?»
Los bolsillos son pequeños agujeros en la roca en los que solo caben de 1 a 3 dedos.
La primera pregunta es: «¿qué dedos utilizo?» casi siempre querrás usar tu dedo medio y el anular en un bolsillo. Esto es así porque:
- Están unidos en la parte posterior más alejada y corren juntos en el flexor profundo de los dedos (músculo del antrebrazo).
- Generalmente son los dedos más largos y, por lo tanto, se ajustan más cómodamente.
- Como son los dos dedos del medio, estabilizan la mano mejor que cualquier otro.
Otro aspecto clave al usar los bolsillos es centrar la gravedad debajo de ellos y tirar hacia abajo (como se muestra en la imagen).
Esto aumenta el contacto con la superficie, lo cual como sabemos, hace que el agarre sea más fuerte.

Slopers: ¿las presas de escalada más difíciles de agarrar?
Pregúntale a cada escalador y tal vez te digan algo diferente. Hay quienes no les gustan las regletas y se sienten mejor en los slopers o presas romas.
También hay escaladores que piensan lo contrario. Sin embargo, Independientemente de tu agarre o presa de escalada favorita, los slopers son agarres redondeados y complicados que vienen en todas las formas y tamaños.
El atributo clave para reconocer cualquier sloper es su falta de borde del cual obtener apoyo para el agarre.
Por esta razón, agarrar un sloper se basa completamente en el contacto con la superficie.
En este agarre se intenta aumentar el contacto presionando la palma contra la presa de escalada y arqueando los dedos para que coincida con la forma de la presa.
La clave aquí es conseguir la mayor fricción posible.
Además, al igual que con los bolsillos, es crucial centrar la gravedad debajo de la presa de escalada.
No es tanto tirar del sloper, sino que ejercer presión sobre su superficie.
Este agarre, a menudo conocido con el anglicismo «Meat Hook» («gancho para carne»), tiene como objetivo maximizar el contacto con la superficie presionando el antebrazo y la muñeca en la presa de escalada.
Si bien este agarre se sentirá más seguro que un agarre de sloper normal, no siempre es óptimo y dejará tus antebrazos empopeyados.
¡Experimenta con los slopers y utiliza estos consejos para encontrar qué agarres funcionan para ti!
Pinzas: ¿tengo que usar mi pulgar al pinzar?
¡Sí! de lo contrario, no estarías pinzando.
Las pinzas son presas de escalada con bordes a cada lado que permiten colocar el pulgar oponiéndose a los otros dedos.
A veces las pinzas serán demasiado anchas para pinzar si es que tienes manos pequeñas o, al contario serán demasiado angosta si tienes las manos grandes.
Sin embargo, la mayoría de las veces que veas una pinza debes intentar rodearla con el pulgar.
¿Por qué? porque eso maximizará el siempre importante contacto con la superficie.
Y no solo eso, sino que el pulgar agrega una fuerza opuesta (el apretón) y se engancha de manera diferente a otras presas de escalada, por lo que casi siempre te sentirás más seguro usando el pulgar.

Si bien aquí hemos establecido una base sólida para comprender las presas de escalada, la mejor manera de conocer los agarres en escalada es salir y usarlas. Juega con diferentes agarres.
Fíjate hacia cuales te acomodas más y cuales quieres evitar a toda costa.
¡Y dedica tiempo a las que no te gustan! luego descubrirás que a medida que aprendes las complejidades de cada presa de escalada, comenzarás a sentirte más cómodo en esas molestas regletas o pésimas pinzas que te han estado causando problemas.